Relaciones poderosas

Las relaciones que tenemos son tareas que realizar, son parte de un vasto plan para nuestra iluminación, son como laboratorios en el cual se reúne a personas para una máxima oportunidad de crecimiento, en una relación sucede el maravilloso regalo en donde la otra persona te muestra que debes sanar o trabajar en ti de ahí el dicho que dice que el otro es tu espejo es a esto a lo que se refiere, a que te refleja lo que necesitas cambiar tu, no significa que el otro sea igual a ti, las personas se atraen de acuerdo a su nivel vibraciónal a su nivel de conciencia, ningún encuentro es accidental cuando comprendes esto bendices y agradeces todo encuentro que hayas tenido porque sabes que cada persona ha sido un maestro que te ha ayudado a ser quién eres, ha dado una enseñanza específica, ha sido parte de tu crecimiento y tu evolución.

Es por eso que ninguna relación se considera un fracaso si aprendiste lo que tenías que aprender entonces la relación fue un éxito, al igual que las relaciones que duran toda la vida es porque han alcanzado simultáneamente un nivel en equilibrio enseñanza-aprendizaje.

Muchos anhelamos encontrar la pareja perfecta, tener los mejores amigos, que tus padres no te cuestionen todo, eso representaría la solución a nuestra vida, ahí creeríamos encontrar la felicidad, pero eso es el peor engaño del ego, no necesitas buscar afuera algo que está en ti qué es el amor real, lo que salva al mundo es cada pensamiento de amor a cada momento, a medida que vamos sanando va sanando el mundo con nosotros.

El propósito de la relaciones es la felicidad, tejer lazos de cooperación y entender que no hay una separación entre nosotros pues somos un todo. Al ver tu grandeza puedo ver la mía, claro que todos somos diferentes y tenemos distintas maneras de ver la vida pero si partimos de un lugar de amor y nos abrimos a la posibilidad de aceptar creamos lazos de integración, de unidad, podemos amar al otro con libertad sin necesidad de querer cambiarlo, etiquetarlo, meterlos en una caja, la alarma para saber que estamos en una caja es la justificación, la defensa y el ataque. Cuando metemos a otros en cajas criticamos su comportamiento para poder justificar nuestra postura eso sólo nos trae frustración y enojo constante, lo único que debemos hacer para tener relaciones poderosas es sanar nuestro corazón y vivir con tranquilidad, sanar las guerras internas que envenenan nuestros pensamientos, sentimientos y actitudes hacia los otros, debemos humanizar siempre al otro, observarlo desde sus miedos, sus sueños, esperanzas, etc.

Bendice al otro y terminarás sintiendote bendecido tu, escoge siempre ser feliz en vez de tener la razón, sólo el amor es real .